Trebalúger es una de las playas vírgenes más mimadas por los menorquines, es de las zonas protegidas, una de las que se conservan más naturales, más auténticamente vírgenes, seguramente no sólo porque requiere de una caminata de unos treinta minutos desde Cala Mitjana.
Ha habido varias intentonas de urbanizar este paraíso pero siempre se han encontrado con la férrea lucha de los menorquines que han sabido mantener nuestro entorno lo menos edificado posible y aunque en algunas zonas de la isla no se ha conseguido es la que mejor se conserva en las Baleares.