El eterno vigía que mira al Mediterráneo. Un puerto sin un faro no es nada, queda desnudo, desamparado. El faro de Cap de Cavalleria es su guía, corona el cabo que emerge como un frontón rocoso a 90 metros del nivel del mar. El precipicio del cabo desciende paulatinamente hacia el oeste diluyéndose con el mar, continuando bajo el agua, a poca profundidad conectando con la illa des Porros, formando un freo llamado Es Pas, creándose un dique natural que permite apaciguar el oleaje inhumano que provocan los vientos endiablados de la tramontana.
Las obras fueron iniciadas en 1854 y se inauguró el 1 de marzo de 1857. El torreón del faro tiene 15 metros. Esta situado en la zona mas oriental de Baleares

Los alrededores del faro son muy rocosos y desde hace un tiempo no muy lejano se corrió, entre los visitantes, la leyenda que si haces un montoncito de piedras mirando al mar y le pides al faro el deseo de volver a Menorca este se cumplirá, por este motivo se ha convertido en un misterioso y curioso escenario lleno de cientos de montoncitos de piedras.

Faro del cap de Cavalleria, visto desde dentro de una cueva que hay en la zona.
